De Marcos: “Nunca he querido escuchar ofertas de fuera”
El lateral, que acaba de colgar las botas, muestra su inquebrantable fidelidad por el Athletic.
Óscar de Marcos está ante una nueva vida. Tras 16 años como profesional, que le han permitido convertirse en leyenda del Athletic, hace repaso a su carrera y enfoca el futuro con nuevos retos. A los 20 años ya había cumplido el “sueño” de su vida. Ha colgado las botas como un One Club Man. Nunca quiso escuchar posibles cantos de sirena. “Es como ponerte en el mercado teniendo mujer”, afirma en una entrevista en la revista Panenka. Su fidelidad a los colores ha sido tan grande que confiesa que con el simple hecho de atender a otros equipos “te puedes liar”. “Yo no sé lo que podría haber llegado a pasar porque nunca he querido escuchar”, asegura.
De Marcos también habla de los anhelos que ha cumplido como león: "Siempre soñé con jugar en el Athletic. Después los sueños van creciendo y pasaron a ser poder llegar a una final, ganar en ciertos estadios, vivir noches increíbles... y luego ya llegó un momento en el que mi sueño era sacar la Gabarra". Respiró aliviado junto con su amigo y capitán Muniain. “Sacar la Gabarra fue inexplicable. Haberlo vivido tan tarde en mi carrera lo hace todavía más increíble”, continúa el 18, un dorsal icónico que recogió de Gurpegui y entrega a Jauregizar, la perla que viene.
“He tenido que esperar y sembrar muchísimo para conseguirlo, pero no sólo yo, mucha gente durante 40 años“, destaca el exlateral. “Cada uno tiene sus sueños y conseguir eso... yo no tengo ni idea de lo que es ganar títulos en otros sitios pero ganar un título con el Athletic sí sé lo que es y sé lo difícil que es llegar a esa felicidad”, zanja.
“Mi techo era estar un día en el Athletic. Quería salir bien, sintiéndome pleno, útil y realizado. De niño quería jugar siempre con mis amigos y el Athletic es lo más parecido a eso”. Cuando era joven le rebautizaron con un apodo. “Cuando alguien me llama garban, ya sé que me conoce”, resume. Era porque de pequeño su cabeza era redonda como un garbanzo. Amorebieta, siempre con su gracejo, dio rienda suelta a esa comparación en la caseta rojiblanca.
Y luego tiene un apartado especial para Bielsa, el entrenador que sacó lo mejor de él junto con Valverde. “Era muy bueno para la crítica, tanto positiva como negativa. Cuando hacía algo mal, me lo hacía ver”, sostiene sobre el Loco. “Los que estuvimos con él, cogimos una coraza, a mí la critica de fuera llegó a no afectarme, solo me afectaba lo de él Solo quería hacer cosas bien para él. Muchas veces en los partidos pienso: si me está viendo Marcelo, me diría: ‘Usted no está regresando como debería”. Sostiene De Marcos que el mensaje del argentino quedó muy marcado, “había muchas cosas en el estudio de partido que a día de hoy lo tenemos incorporado”.
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